Google defiende el impacto de su IA en el tráfico de búsqueda ante la alarma de los editores
Google se está defendiendo de un coro creciente de editores web que afirman que sus cada vez más prevalentes funciones de búsqueda impulsadas por IA están desviando tráfico valioso, asegurando que el volumen general de clics orgánicos se mantiene estable y que la calidad de la interacción del usuario, de hecho, ha mejorado. La defensa del gigante tecnológico, articulada recientemente en una publicación de blog por Liz Reid, vicepresidenta y jefa de Búsqueda de Google, intenta calmar las crecientes preocupaciones de la industria de que las descripciones generales de IA (AI Overviews) y el modo IA (AI Mode) están alterando fundamentalmente el ecosistema de contenido digital.
La declaración de Reid sostiene que Google continúa enviando miles de millones de clics a la web diariamente, enfatizando que la introducción de la IA en la Búsqueda, incluidas funciones como las descripciones generales de IA, anima a los usuarios a hacer preguntas más complejas y diversas. Esto, según Google, lleva a que se presenten más enlaces en la página de resultados de búsqueda, creando así más oportunidades para que los sitios web sean descubiertos. Google define los “clics de calidad” como aquellos en los que los usuarios no regresan inmediatamente a los resultados de búsqueda, lo que sugiere una interacción más profunda con el contenido. La compañía también desestima algunos informes de terceros sobre la disminución del tráfico por basarse en “metodologías defectuosas” o por reflejar cambios anteriores a las funciones de IA. Además, Google reconoce una evolución natural en el comportamiento del usuario, donde algunos sitios pueden ver menos tráfico mientras que otros ganan, particularmente aquellos que ofrecen “voces auténticas y perspectivas de primera mano” como foros, videos y podcasts.
Sin embargo, esta perspectiva optimista contrasta fuertemente con las experiencias de numerosos editores y los hallazgos de investigaciones independientes. Grandes organizaciones de noticias y pequeños creadores de contenido han reportado caídas significativas en el tráfico de la Búsqueda de Google desde el lanzamiento más amplio de las descripciones generales de IA. Un estudio del Pew Research Center, por ejemplo, encontró que los usuarios que encontraban resúmenes de IA solo hacían clic en los sitios web el 8% de las veces, en comparación con el 15% para los resultados de búsqueda tradicionales. Otros análisis, incluidos los de Similarweb, han indicado que las búsquedas que no resultan en clics a sitios web de noticias han aumentado del 56% al 69% desde que se introdujeron las descripciones generales de IA. Medios de comunicación específicos como CNN han reportado disminuciones de tráfico del 30%, mientras que Business Insider y HuffPost han visto caídas de alrededor del 40% desde que se lanzaron las descripciones generales de IA. Business Insider, en particular, vio su tráfico de búsqueda orgánica de Google desplomarse un 55% entre abril de 2022 y abril de 2025, lo que llevó a importantes reducciones de personal. Los editores más pequeños han enfrentado pérdidas aún más catastróficas, con algunos reportando caídas de tráfico del 70-90%.
El núcleo del problema para muchos editores es el fenómeno del “cero clic”, donde las respuestas generadas por IA satisfacen directamente las consultas de los usuarios en la página de resultados de búsqueda, eliminando la necesidad de visitar un sitio web externo. Esto ha llevado a acusaciones de grupos como News/Media Alliance de que el modo IA de Google constituye un “robo” al resumir contenido sin la atribución o el reparto de ingresos adecuados. Los críticos también señalan que los editores actualmente no tienen la opción de excluir su contenido de los resúmenes de IA sin eliminar por completo sus sitios de la Búsqueda de Google.
La defensa de Google también reconoce que el cambio en el comportamiento del usuario es anterior a la adopción generalizada de la IA en la búsqueda, señalando que los grupos demográficos más jóvenes han recurrido cada vez más a plataformas como TikTok e Instagram para ciertos tipos de búsquedas, funcionando como motores de búsqueda alternativos. Si bien Google mantiene su compromiso con el ecosistema web y afirma que la IA amplía las oportunidades para el descubrimiento de contenido, la falta de datos específicos y verificables por parte de Google para respaldar sus afirmaciones de tráfico agregado estable, especialmente a la luz de las pérdidas generalizadas de los editores, mantiene el debate ferozmente vivo. Los editores, mientras tanto, están explorando cada vez más estrategias como suscripciones directas, boletines y acuerdos de licencia para mitigar su dependencia del cambiante panorama de búsqueda de Google.