Musk: Google lidera la carrera de IA con ventaja en cómputo y datos
Elon Musk, el prolífico empresario detrás de Tesla y xAI, afirmó recientemente que Google posee el mayor potencial para emerger como el líder en inteligencia artificial. Esta aseveración, hecha el 14 de agosto de 2025, se atribuyó a la significativa ventaja actual de Google tanto en potencia computacional como en datos.
La formidable posición de Google en el panorama de la IA se sustenta en gran medida en su profunda inversión de una década en hardware personalizado, sobre todo sus Unidades de Procesamiento de Tensores (TPUs). La última iteración, la Ironwood TPU (v7), lanzada en 2025, representa un salto sustancial en hardware específico para IA, diseñado explícitamente tanto para cargas de trabajo de entrenamiento como de inferencia. Esta integración vertical, que abarca desde silicio propietario hasta su vasta red global en la nube, marcos de software como TensorFlow y Vertex AI, y sistemas de computación distribuida, permite a Google optimizar el rendimiento y controlar los costos de maneras que pocos competidores pueden igualar. Los análisis de la industria sugieren que esta estrategia de hardware interno le otorga a Google una notable ventaja en eficiencia de costos, pudiendo obtener potencia de cómputo de IA a aproximadamente el 20% del costo incurrido por aquellos que dependen de GPUs Nvidia de gama alta. Esto se traduce directamente en precios de API más asequibles para sus modelos de IA de vanguardia, ofreciendo a las empresas una mejor “inteligencia por dólar”.
Más allá de la pura capacidad computacional, la ventaja de datos sin igual de Google se deriva de miles de millones de interacciones diarias a través de sus servicios ubicuos, incluyendo Search, Gmail y YouTube. Este flujo continuo de datos de usuario sirve como un volante que se auto-refuerza, refinando constantemente los modelos de IA, mejorando la experiencia del usuario y solidificando aún más el liderazgo de Google. El compromiso de la compañía con la innovación en IA es evidente en sus sustanciales inversiones de capital, con planes de destinar aproximadamente $75 mil millones en 2025 a servidores y centros de datos para reforzar sus negocios de cómputo de IA y la nube.
Los frutos de esta inversión ya son visibles en varios sectores. Google ha reportado una fuerte adopción de sus últimos modelos, incluyendo Gemini Flash, Gemini 2.0, Imagen 3 y el modelo avanzado de generación de video, Veo. La compañía también destaca la entrega de más de 2 mil millones de asistencias de IA cada mes a usuarios empresariales a través de Google Workspace. En Google Cloud Next '25, numerosas historias de clientes mostraron el impacto tangible de la adopción de la IA, desde McDonald’s aprovechando Google Distributed Cloud para mejorar las operaciones de sus restaurantes hasta la transformación de la película de 1939 El Mago de Oz para The Sphere, requiriendo IA de Google para generar contenido nuevo y contextualmente apropiado. Empresas de diversas industrias, desde servicios financieros hasta automotriz y minorista, están integrando las soluciones de IA de Google para mejorar la eficiencia, optimizar las experiencias del cliente e impulsar la innovación.
Si bien reconoce el actual liderazgo de Google en cómputo y datos para IA general, Musk también ha articulado una perspectiva matizada sobre el panorama más amplio de la IA. Recientemente afirmó que Tesla es “con mucho, la mejor del mundo en IA del mundo real”, distinguiéndola de la “IA de centro de datos” donde Google sobresale. Musk enfatiza la capacidad de Tesla para integrar la IA en máquinas físicas que interactúan con el mundo real y desordenado, como su sistema Full Self-Driving (FSD) y los robots Optimus. Esta distinción resalta diferentes facetas del desarrollo y la aplicación de la IA. Además, la conciencia de Musk, e incluso la aprehensión, de la dominancia de la IA de Google no es nueva; correos electrónicos de 2016 revelan sus preocupaciones sobre que Google DeepMind pudiera llevar a una “dictadura de la IA”, lo que en parte impulsó la formación de OpenAI. Este contexto histórico subraya la profunda rivalidad y las dinámicas competitivas dentro de la industria de la IA en rápida evolución, incluso cuando Musk reconoce públicamente la superioridad de recursos actual de Google.
La estrategia integrada de Google, que combina hardware personalizado, vastos depósitos de datos e innovación continua, la posiciona como una fuerza formidable en la carrera global de la IA. A medida que la industria avanza, la batalla por la supremacía de la IA continúa intensificándose, moldeada por avances tecnológicos, inversiones estratégicas y las opiniones francas de sus figuras más influyentes.