La Visión de IA de Demis Hassabis: AGI para 2030 y Secretos del Universo
Demis Hassabis, cofundador de Google DeepMind, ofreció recientemente una profunda visión de su ambiciosa perspectiva para la inteligencia artificial, trascendiendo el enfoque típico en el desarrollo de productos o la valoración de mercado. En una extensa conversación de dos horas y media en el podcast de Lex Fridman, Hassabis articuló una filosofía centrada no solo en construir una IA poderosa, sino en aprovecharla como una herramienta fundamental para comprender la naturaleza misma del universo. Esta discusión, mucho más que una inmersión técnica profunda, reveló las motivaciones intensamente humanas que impulsan a una de las figuras más influyentes que moldean el futuro de la IA.
Entre las revelaciones más impactantes estuvo la predicción de Hassabis de que la humanidad tiene un 50% de posibilidades de lograr la inteligencia artificial general (AGI) para 2030. Establece un listón notablemente alto para la AGI, definiéndola como un sistema capaz de demostrar una brillantez consistente y transdisciplinar en razonamiento, creatividad, planificación y resolución de problemas, muy lejos de la mera competencia en tareas específicas. Su visión se extiende más allá de los chatbots actuales, imaginando sistemas de IA que podrían inventar nuevas teorías científicas, diseñar juegos intrincados desde los primeros principios, o modelar física compleja simplemente observando el mundo, de manera similar a cómo el modelo de video Veo 3 de DeepMind extrajo la física intuitiva de los clips de YouTube. A pesar de este optimismo, Hassabis se mantiene cauteloso, reconociendo que si bien los modelos actuales están escalando eficazmente, el escalado por sí solo podría no ser suficiente; nuevos avances científicos aún podrían ser indispensables para que la IA alcance capacidades tan profundas.
A diferencia de muchos líderes de alto perfil en la esfera de la IA, que a menudo provienen de entornos empresariales o capitalistas, Hassabis es fundamentalmente un científico. Un antiguo niño prodigio del ajedrez que hizo la transición a la neurociencia, cofundó DeepMind con el objetivo singular de “resolver la inteligencia” como un medio para “resolver todo lo demás”. Paul Roetzer, CEO del Marketing AI Institute, destaca el marcado contraste en el discurso de Hassabis en comparación con otros líderes de laboratorios de IA. Los comentarios de Hassabis están consistentemente impregnados de curiosidad científica, desprovistos de lanzamientos de productos o métricas financieras. En cambio, habla apasionadamente sobre el uso de la IA para modelar células biológicas, simular la aparición de la vida a partir de una “sopa primordial” y abordar preguntas fundamentales como la naturaleza de la conciencia o el problema “P vs NP” en matemáticas. Roetzer expresa una profunda esperanza en las intenciones puras y basadas en la ciencia de Hassabis, comparando sus aspiraciones con las de luminarias científicas históricas como Von Neumann o Einstein.
A lo largo de la entrevista, Hassabis volvió constantemente a su tema singular y primordial: desplegar la IA para desvelar los misterios más profundos del universo. Discutió apasionadamente el potencial de la IA para modelar células, comenzando con levadura simple, o para simular los orígenes mismos de la vida. Él vislumbra sistemas de IA capaces de proponer conjeturas científicas dignas de las mentes más grandes, pasando de ser meras herramientas a convertirse en verdaderos socios en el descubrimiento. Para lograr esto, DeepMind está explorando sistemas híbridos que integran redes neuronales con algoritmos de búsqueda y técnicas evolutivas. El objetivo final es desarrollar una IA que no solo imite la inteligencia, sino que la extienda activamente, permitiendo a la humanidad descubrir nuevos conocimientos y explorar lo desconocido.
A pesar de articular una visión tan extraordinaria para el futuro, Hassabis se destaca como una de las voces menos impulsadas por la exageración en el panorama de la IA. Enfatiza constantemente la necesidad crítica de precaución, transparencia y cooperación global en el desarrollo de la AGI. Expresa preocupaciones sobre el posible uso indebido por parte de actores maliciosos y subraya la importancia primordial de comprender los valores éticos y las motivaciones incrustadas en cada modelo de IA que se construye. Esta mezcla única de visión audaz y profunda responsabilidad es quizás el atributo más convincente de Hassabis, lo que hace que su perspectiva sea invaluable y ofrece una sensación tangible de optimismo para un futuro de abundancia, como sugiere Roetzer, si el mundo que Hassabis vislumbra realmente se convierte en realidad.