Cofundador de Wiz: La "seguridad de ambiente" crucial para la era cibernética de IA
El cofundador de Wiz, una firma de seguridad en la nube recientemente adquirida por Google por 32 mil millones de dólares, ha enfatizado la necesidad crítica de la “seguridad de ambiente” para contrarrestar la tendencia emergente de la “codificación de ambiente”. Esta perspectiva destaca un cambio significativo en el panorama de la ciberseguridad, impulsado por la rápida adopción de la IA en el desarrollo de software.
Wiz, una empresa israelí-estadounidense fundada en enero de 2020, se estableció rápidamente como líder en seguridad en la nube, logrando 100 millones de dólares en ingresos recurrentes anuales en 18 meses y alcanzando los 350 millones de dólares en ARR para febrero de 2024. Su plataforma ofrece visibilidad sin agentes y priorización de riesgos en entornos multinube, incluyendo AWS, Microsoft Azure, Google Cloud Platform, Oracle Cloud Infrastructure y Kubernetes. Este rápido crecimiento y enfoque innovador hicieron de Wiz un objetivo atractivo para Google, que finalizó su adquisición en efectivo de 32 mil millones de dólares en marzo de 2025. Esta adquisición, la más grande de Google en su historia, busca integrar Wiz en Google Cloud, fortaleciendo significativamente sus capacidades de ciberseguridad en medio de la creciente influencia de la inteligencia artificial.
El concepto de “codificación de ambiente” ha ganado tracción en el desarrollo de software de 2025, caracterizado por un enfoque rápido e instintivo, a menudo muy dependiente de la asistencia de la IA. Esta metodología permite a los desarrolladores omitir fases extensas de diseño, prototipando y generando código rápidamente con indicaciones de IA. Si bien la “codificación de ambiente” ofrece velocidad y espontaneidad, acelerando la innovación y reduciendo las barreras de entrada para los no expertos, también introduce riesgos sustanciales de ciberseguridad. El énfasis en la velocidad puede llevar a omisiones críticas, especialmente cuando se combina con herramientas de IA y una disciplina de proceso menos estricta.
Para contrarrestar estos riesgos, surge la necesidad de la “seguridad de ambiente”. Este nuevo enfoque de seguridad tiene como objetivo abordar las vulnerabilidades inherentes al desarrollo rápido impulsado por la IA. Si bien el término “seguridad de ambiente” en sí mismo podría ser un concepto naciente en el discurso general de la ciberseguridad, las tecnologías existentes como la Cifrado Verificable Basado en Identidad (Verifiable Identity-Based Encryption, VIBE) ofrecen un vistazo al tipo de seguridad robusta y centrada en la identidad que podría ser crucial. VIBE, por ejemplo, es un esquema de cifrado y autenticación asimétrico y sin certificados diseñado para proporcionar seguridad absoluta y simplificar el intercambio de claves. Se centra en verificar la autenticidad de usuarios, dispositivos y datos, previniendo la alteración de datos o el robo de identidad, y es adecuado para asegurar IoT, blockchain, sistemas fintech y otras soluciones conectadas.
Para las firmas de seguridad en la nube como Wiz, el desafío ahora es competir con una “generación de firmas cibernéticas nativas de la IA”. Wiz ya ha demostrado su previsión al lanzar AI Security Posture Management (AI-SPM), que identifica los servicios, tecnologías y bibliotecas de IA en uso, y aplica líneas base de configuración de IA para prevenir configuraciones erróneas que podrían exponer datos sensibles. Esta postura proactiva, junto con la importante inversión de Google, posiciona a Wiz para desempeñar un papel fundamental en la configuración del futuro de la seguridad en la nube en un mundo donde la IA es lo primero. Se espera que la integración de la detección de amenazas sin agentes y nativa de IA de Wiz redefina la confianza multinube, permitiendo a Google ofrecer un modelo de seguridad más autónomo y preventivo.