Nvidia alerta de "desastre" por "kill switches" en chips, niega acusaciones de China
Nvidia ha emitido una severa advertencia contra la incorporación de “kill switches” o “puertas traseras” en sus chips avanzados, afirmando que tales características invitarían al desastre y socavarían fundamentalmente la infraestructura digital global. Esta postura firme surge en medio de acusaciones de China sobre vulnerabilidades de seguridad en los chips de Nvidia y discusiones en curso en EE. UU. sobre posibles requisitos legislativos para la verificación de ubicación y mecanismos de desactivación remota en los semiconductores exportados.
La Administración del Ciberespacio de China afirmó recientemente que se reunió con Nvidia por “graves problemas de seguridad”, alegando que expertos en IA de EE. UU. habían “revelado que los chips de computación de Nvidia tienen seguimiento de ubicación y pueden apagar la tecnología de forma remota”. Esta acusación se dirige específicamente al chip H20, una variante que Nvidia desarrolló para el mercado chino para cumplir con las restricciones de exportación de EE. UU. diseñadas para limitar el acceso de China a capacidades avanzadas de IA. Nvidia negó rápidamente estas afirmaciones, declarando inequívocamente que sus chips no contienen puertas traseras ni kill switches que permitan el acceso o control remoto.
Al mismo tiempo, los legisladores estadounidenses están considerando la “Ley de Seguridad de Chips”, un proyecto de ley propuesto que exigiría la “verificación de ubicación” para los chips exportados y exploraría métodos para prevenir el uso no autorizado. Si bien los defensores, incluida la oficina del senador Tom Cotton, argumentan que esta legislación es crucial para evitar que los chips estadounidenses avanzados caigan en manos de adversarios, los críticos advierten que tales disposiciones podrían introducir eficazmente los mismos “kill switches” contra los que Nvidia está luchando. El Plan de Acción de IA de la Casa Blanca se hace eco de un sentimiento similar, instando a las agencias gubernamentales y a los fabricantes de chips a investigar el aprovechamiento de características de verificación de ubicación existentes o nuevas para asegurar que los chips no terminen en “países de preocupación”.
David Reber Jr., Director de Seguridad de Nvidia, elaboró la posición de la compañía en una reciente publicación de blog, enfatizando que los sistemas confiables no se construyen con puntos de acceso ocultos o capacidades de desactivación remota. Sostuvo que exigir tales características sería “un regalo para los hackers y actores hostiles”, lo que llevaría a una fragmentación de la confianza en la tecnología estadounidense. Reber Jr. comparó un kill switch en un chip con una concesionaria de automóviles que retiene el control remoto sobre el freno de mano de un vehículo, describiéndolo como un “defecto permanente más allá del control del usuario” y “una invitación abierta al desastre”. Argumentó que la ley establecida sabiamente obliga a las empresas a corregir vulnerabilidades, no a crearlas intencionalmente, y que exigir kill switches sería una reacción exagerada con un daño irreparable a los intereses económicos y de seguridad nacional de Estados Unidos.
El argumento de Nvidia se alinea con un consenso de larga data entre los expertos en ciberseguridad: no existe una “buena” puerta trasera secreta, solo vulnerabilidades peligrosas esperando ser explotadas. Reber Jr. invocó el ejemplo histórico de la iniciativa Clipper Chip de la Agencia de Seguridad Nacional de la década de 1990, un intento de construir un cifrado fuerte con una puerta trasera gubernamental a través de un sistema de custodia de claves. Ese proyecto fue finalmente abandonado después de que los investigadores de seguridad expusieran fallas fundamentales que podrían ser explotadas por partes maliciosas, demostrando cómo las vulnerabilidades centralizadas socavan la confianza del usuario y la seguridad del sistema.
Según Reber Jr., la introducción de puertas traseras o kill switches interrumpiría la arquitectura de seguridad en capas de Nvidia, que está diseñada con múltiples salvaguardias para prevenir puntos únicos de falla. Subrayó que este enfoque ha fomentado durante mucho tiempo la innovación y protegido a los usuarios, contribuyendo al crecimiento económico, y afirmó que no es el momento de desviarse de esta fórmula exitosa. La compañía sostiene que la verdadera seguridad del producto proviene de pruebas internas rigurosas, validación independiente y estricta adherencia a los estándares globales de ciberseguridad.