Agencias de EE. UU. obtienen ChatGPT Enterprise por $1: Adopción de IA y obstáculos políticos

Arstechnica

El poder ejecutivo federal de EE. UU. está preparado para un cambio tecnológico significativo, ya que OpenAI ha llegado a un acuerdo para proporcionar acceso a ChatGPT Enterprise a más de dos millones de trabajadores gubernamentales. Este amplio acuerdo se logra a un costo notablemente bajo, efectivamente solo $1 por agencia durante todo un año, lo que señala un gran impulso para integrar la inteligencia artificial avanzada en las operaciones federales. El anuncio sigue de cerca un acuerdo general firmado por la Administración de Servicios Generales (GSA) de EE. UU., que allanó el camino para que proveedores de IA como OpenAI, Google y Anthropic suministren sus herramientas a los empleados federales.

Según los términos de este nuevo acuerdo, los trabajadores gubernamentales obtendrán acceso a ChatGPT Enterprise, un nivel de cuenta especializado diseñado para grandes organizaciones. Esta versión ofrece acceso a los “modelos frontera” más avanzados de OpenAI y características avanzadas, junto con capacidades de procesamiento de datos significativamente mayores y un compromiso más robusto con la privacidad de los datos que las cuentas de consumidor estándar. La plataforma Enterprise ya ha sido probada en varias grandes corporaciones y organizaciones en los últimos meses, lo que indica su preparación para una implementación generalizada. Durante un período inicial de 60 días, las agencias también disfrutarán de acceso ilimitado a funcionalidades avanzadas como Deep Research y Advanced Voice Mode, sin obligación de renovar el servicio una vez que concluya la prueba inicial de un año. Esta iniciativa se basa en un programa piloto limitado que vio a ChatGPT implementado para trabajadores federales a través del Departamento de Defensa de EE. UU. a principios de este verano.

OpenAI ha enmarcado este monumental acuerdo como un acto de servicio público, alineándolo con un principio fundamental del Plan de Acción de IA de la Administración Trump. El objetivo declarado es empoderar a los trabajadores federales reduciendo el tiempo dedicado a la “burocracia y el papeleo”, permitiéndoles así dedicar más energía a su misión principal: servir al pueblo estadounidense. El Plan de Acción de IA más amplio tiene como objetivo no solo integrar herramientas de IA en las funciones gubernamentales para mejorar la eficiencia, sino también expandir los centros de datos centrados en IA en todo Estados Unidos.

Sin embargo, la implementación de esta adopción generalizada de la IA no está exenta de complejidades, particularmente en lo que respecta a consideraciones ideológicas. La administración Trump emitió recientemente una orden ejecutiva titulada “Prevenir la IA Woke”, que exige que las herramientas de IA adquiridas por el gobierno federal no promuevan “dogmas ideológicos como DEI” (Diversidad, Equidad e Inclusión). Esto presenta un desafío potencial para OpenAI, ya que las facciones conservadoras dentro de la administración han expresado consistentemente su frustración por los supuestos sesgos de izquierda de ChatGPT en tales temas. Los esfuerzos para entrenar grandes modelos de lenguaje para que se adhieran consistentemente a una ideología específica han arrojado, en el mejor de los casos, resultados mixtos. Si bien OpenAI ha ofrecido previamente al gobierno federal “modelos personalizados para la seguridad nacional”, no ha habido un compromiso público con respecto a la provisión de modelos personalizados diseñados para evitar inclinaciones ideológicas particulares.

Además, los detalles específicos sobre cómo ChatGPT mantendrá los estrictos estándares de seguridad requeridos para los trabajadores federales permanecen sin revelarse al público. Cuando se le preguntó sobre este asunto, un portavoz de la GSA afirmó que “el gobierno está adoptando un enfoque cauteloso y de seguridad primero hacia la IA”, enfatizando que “esto garantiza que la información sensible permanezca protegida al tiempo que permite a las agencias beneficiarse de las eficiencias impulsadas por la IA”. A pesar de estas garantías, las salvaguardias técnicas precisas y los protocolos para manejar datos gubernamentales sensibles a través de la plataforma de OpenAI esperan una aclaración pública. Esta ambiciosa implementación de la IA en todo el gobierno de EE. UU. representa un salto tecnológico significativo, equilibrando la promesa de una mayor eficiencia con intrincadas consideraciones políticas y de seguridad.