OpenAI podría alcanzar los $500 mil millones en valoración con venta secundaria de acciones
OpenAI, la potencia de inteligencia artificial detrás de ChatGPT, está en discusiones avanzadas con inversores para una posible venta secundaria de acciones que podría catapultar su valoración a unos asombrosos 500 mil millones de dólares. Esta transacción propuesta, aún en sus etapas iniciales, permitiría a los empleados actuales y anteriores vender sus acciones, ofreciéndoles una oportunidad significativa para materializar ganancias de la meteórica ascensión de la compañía. Se informa que el inversor existente Thrive Capital está listo para liderar este acuerdo crucial, lo que subraya la confianza continua en la trayectoria del líder de la IA.
Esta valoración prospectiva de 500 mil millones de dólares marca una dramática escalada desde la evaluación previa de OpenAI de 300 mil millones de dólares, establecida durante una ronda de financiación primaria de 40 mil millones de dólares en abril. Si el acuerdo se materializa, posicionaría a OpenAI como la startup privada más valiosa a nivel mundial, superando incluso a SpaceX de Elon Musk, que fue valorada en 350 mil millones de dólares en diciembre, y a ByteDance, la empresa matriz de TikTok, en 315 mil millones de dólares. La rápida apreciación refleja el intenso interés de los inversores y la creciente competencia por el talento de primer nivel dentro del floreciente sector de la inteligencia artificial.
La motivación detrás de esta venta secundaria es multifacética. Principalmente, busca proporcionar liquidez a los empleados de larga data, permitiéndoles monetizar su capital sin que la empresa necesite recaudar nuevo capital o diluir a los accionistas existentes. Esta estrategia es crucial para la retención de talento, especialmente mientras la industria de la IA lidia con una agresiva guerra por el talento. Los informes indican que empresas rivales, en particular Meta, están reclutando agresivamente a investigadores de IA, ofreciendo paquetes de compensación sustanciales para construir sus propias divisiones de “superinteligencia”. Al permitir que los empleados vendan acciones, OpenAI puede ofrecer un poderoso contra-incentivo, alineando las recompensas financieras con el crecimiento explosivo de la compañía.
La creciente valoración de OpenAI se sustenta en un impresionante impulso operativo. Su producto estrella, ChatGPT, continúa demostrando una adopción generalizada, acercándose a los 700 millones de usuarios activos semanales, un salto significativo desde aproximadamente 400 millones en febrero. Este crecimiento de usuarios se ha traducido en un sólido rendimiento financiero, con ingresos recurrentes anuales (ARR) que, según se informa, se duplicaron en los primeros siete meses de 2025. La compañía ahora opera a una tasa de ingresos anualizada de 12 mil millones de dólares y se proyecta que alcanzará los 20 mil millones de dólares para finales de año. Una escalada tan rápida alimenta el optimismo de los inversores, a pesar de los considerables costos de infraestructura e investigación y desarrollo asociados con el avance de la IA.
Aunque la compañía aún no es rentable, su trayectoria de ingresos y el compromiso de los usuarios señalan una fuerte validación del mercado para sus tecnologías de IA generativa. Esta venta secundaria de acciones también se considera un movimiento estratégico que precede a una posible Oferta Pública Inicial (IPO), aunque la directora financiera de OpenAI, Sarah Friar, ha indicado que una cotización pública solo ocurriría cuando tanto la compañía como las condiciones del mercado sean óptimas. Las discusiones también coinciden con las insinuaciones de OpenAI sobre el inminente anuncio de GPT-5, con los primeros probadores supuestamente impresionados por sus capacidades, particularmente en aplicaciones científicas, de codificación y matemáticas. La anticipación en torno a los lanzamientos de nuevos modelos alimenta aún más el entusiasmo y la confianza de los inversores en el liderazgo tecnológico continuo de OpenAI.
Las discusiones actuales destacan una tendencia más amplia de la industria donde las principales firmas tecnológicas privadas están utilizando transacciones secundarias para actualizar sus valoraciones y recompensar al personal en un mercado de capitales dinámico. Se informa que competidores como Anthropic también están buscando una financiación sustancial con altas valoraciones, lo que ilustra aún más la intensa carrera por el capital y el talento en el ecosistema de la IA. Mientras OpenAI navega por estos complejos paisajes financieros y operativos, su potencial valoración de 500 mil millones de dólares subraya el profundo impacto y el valor futuro percibido de la inteligencia artificial.