Tesla disuelve equipo de supercomputación Dojo, ¿freno a la IA clave?

Bloomberg

Tesla ha iniciado una reestructuración significativa de sus esfuerzos en inteligencia artificial, disolviendo, según se informa, su equipo dedicado al superordenador Dojo y viendo la partida de su líder, Peter Bannon. Este movimiento marca un cambio notable en la ambiciosa estrategia del fabricante de automóviles para desarrollar capacidad de computación interna específicamente para su tecnología de vehículos sin conductor.

Según fuentes familiarizadas con la toma de decisiones internas, el Director Ejecutivo Elon Musk emitió la directriz para cesar el proyecto Dojo. Se dice que Peter Bannon, quien encabezó la iniciativa, está dejando la compañía. La disolución sigue a un período en el que el equipo ya había experimentado desgaste, con aproximadamente 20 trabajadores que recientemente hicieron la transición a una entidad recién formada llamada DensityAI. El personal restante del equipo Dojo está siendo reasignado a otros proyectos de centros de datos y computación dentro de Tesla, lo que señala una reasignación más amplia de recursos en lugar de un abandono total del desarrollo de IA.

El superordenador Dojo fue concebido como un sistema de computación de alto rendimiento construido a medida, diseñado para acelerar el entrenamiento de las redes neuronales de Tesla para su software de Conducción Autónoma Total (FSD). El objetivo era procesar grandes cantidades de datos de conducción del mundo real de manera más eficiente y rápida que el hardware comercialmente disponible, lo que le daría a Tesla una ventaja competitiva en la carrera por los vehículos autónomos. Públicamente, Musk a menudo había elogiado a Dojo como un componente crucial de la independencia tecnológica de Tesla y un habilitador clave para lograr una verdadera autonomía de Nivel 5.

Este último desarrollo plantea preguntas sobre la dirección futura de la infraestructura de IA de Tesla. Si bien la compañía ha invertido fuertemente en su pila de software FSD, la decisión de desmantelar el esfuerzo de hardware personalizado de Dojo podría sugerir varias posibilidades. Podría indicar desafíos imprevistos en la escala de la arquitectura personalizada, costos más altos de lo anticipado en comparación con el uso de soluciones comerciales como las potentes GPU de Nvidia, o quizás un giro estratégico hacia la optimización de los recursos informáticos y el software existentes en lugar de construir una plataforma de supercomputación única desde cero.

El movimiento también llega en un momento de intensa competencia en el espacio de la conducción autónoma, con varios fabricantes de automóviles y empresas tecnológicas invirtiendo recursos en investigación y desarrollo de IA. La capacidad de Tesla para recopilar y aprovechar datos de conducción del mundo real de su vasta flota sigue siendo un activo significativo. Sin embargo, la inesperada disolución del equipo Dojo sugiere una reevaluación de cómo se procesarán esos datos y cómo la compañía logrará finalmente su objetivo largamente declarado de vehículos totalmente autónomos. La reasignación de personal a otros proyectos de computación internos implica que, si bien el proyecto específico de hardware Dojo está siendo archivado, el compromiso general de Tesla con la IA y el procesamiento de datos sigue siendo robusto, aunque con un enfoque técnico probablemente revisado.