Buscadores de Empleo: ¿Usar o Evitar la IA en su Búsqueda?
El mercado laboral moderno se ha convertido en un escenario complejo donde tanto los buscadores de empleo como los empleadores recurren cada vez más a la inteligencia artificial, creando una dinámica intrigante y, a veces, contradictoria. Una encuesta reciente de Business Insider, junto con otras encuestas exhaustivas de principios de 2025, arroja luz sobre esta creciente integración de la IA, revelando un panorama donde la tecnología es tanto una herramienta poderosa como una fuente de gran aprehensión.
Los buscadores de empleo están adoptando la IA a un ritmo acelerado. Las encuestas indican que una mayoría sustancial, con cifras que oscilan entre el 58% y el 75%, ahora aprovecha las herramientas de IA en su proceso de solicitud. Esta adopción generalizada está impulsada por la promesa de eficiencia y una ventaja competitiva. Los candidatos utilizan con frecuencia la IA para generar texto para currículums y cartas de presentación, adaptar solicitudes a descripciones de trabajo específicas, elaborar muestras de escritura e incluso prepararse para entrevistas. El objetivo suele ser simplificar los aspectos tediosos de la búsqueda de empleo, asegurando que las solicitudes estén optimizadas con palabras clave relevantes para navegar los sistemas de seguimiento de solicitantes (ATS) que muchas empresas emplean. Algunos datos sugieren que esta estrategia puede producir beneficios tangibles, con un estudio que encontró que el 77% de los usuarios de IA obtuvieron empleos mejor remunerados en comparación con el 48% de los no usuarios de IA, y ciertos campos como la tecnología y el marketing observaron tasas de devolución de llamadas más altas para los currículums asistidos por IA.
Sin embargo, el entusiasmo por la IA por parte del solicitante se encuentra con una perspectiva matizada, a menudo cautelosa, por parte de los empleadores. Si bien más del 60% de las empresas utilizan la IA para tareas de reclutamiento como la selección de currículums, la redacción de anuncios de empleo y la generación de preguntas para entrevistas, una parte significativa de los gerentes de contratación expresan escepticismo o rechazo total de los materiales de candidatos generados por IA. Casi uno de cada cuatro reclutadores, por ejemplo, descartaría un currículum si sospechara que fue generado por IA. Muchos gerentes de contratación afirman que pueden detectar contenido producido por IA rápidamente, a veces en cuestión de segundos, aunque las pruebas revelan que esta percepción no siempre es precisa. Las preocupaciones sobre el fraude de candidatos, la tergiversación de habilidades y la integridad del proceso de contratación son primordiales para los empleadores. Algunos incluso informan un aumento de “solicitantes falsos” que utilizan deepfakes y IA generativa para navegar el proceso de contratación, lo que lleva a Gartner a predecir que uno de cada cuatro perfiles de candidatos en todo el mundo podría ser fraudulento para 2028.
Esto crea un peculiar escenario de “IA versus IA” donde ambas partes utilizan herramientas sofisticadas, lo que lleva a una potencial carrera armamentista en el ámbito de la contratación. A pesar de las ganancias de eficiencia percibidas, algunas investigaciones sugieren que los candidatos que usan IA podrían tardar un poco más en encontrar un trabajo en comparación con aquellos que no lo hacen. Además, los propios buscadores de empleo albergan reservas sobre el papel de la IA en la contratación; solo el 26% confía en que la IA los evalúe de manera justa, y una cuarta parte informa una reducción de la confianza en los empleadores que utilizan la IA para la evaluación. Un notable 65% de las personas se sienten incómodas con las empresas que emplean IA en el reclutamiento y la contratación, y el 90% desea transparencia sobre su uso.
La dinámica evolutiva subraya una necesidad crítica de transparencia y directrices éticas. A medida que la competencia en IA se convierte cada vez más en una habilidad deseable para los puestos de nivel de entrada, tanto los buscadores de empleo como los empleadores deben navegar este cambio tecnológico con claridad e integridad. La tensión entre aprovechar la IA para la eficiencia y mantener la autenticidad y la confianza definirá el futuro de la adquisición de talento.