Alan Tudyk en 'Yo, Robot': Su robot superó a Will Smith y fue marginado

Gizmodo

Alan Tudyk se ha labrado un nicho distintivo en Hollywood, encarnando frecuentemente personajes más allá del reino humano. Ya sea prestando su voz a queridos personajes animados en películas como Moana y Encanto, interpretando alienígenas en Resident Alien, o dando vida a robots en Rogue One y Superman, su versatilidad en papeles de otro mundo es innegable. Sin embargo, mucho antes de muchas de estas actuaciones icónicas, Tudyk asumió el papel fundamental de Sonny, el robot líder avanzado en el éxito de taquilla de 2004 Yo, Robot, protagonizado por Will Smith. Lo que muchos cinéfilos quizás no se den cuenta, sin embargo, es la sorprendente razón por la que la significativa contribución de Tudyk a la película pasó en gran parte desapercibida durante su masiva campaña promocional.

La curiosa omisión de Tudyk del circuito de prensa de Yo, Robot permaneció como un secreto silencioso de la industria hasta hace poco, cuando el actor reveló la historia completa en el podcast “Toon’d In with Jim Cummings”. Según Tudyk, la decisión provino directamente de las proyecciones de prueba de la película. “Estaban haciendo audiencias de prueba para la película, y califican a los personajes en este tipo de proyección de prueba”, relató Tudyk. La retroalimentación fue sorprendente: “Me llegó la noticia: ‘Alan, estás obteniendo una calificación más alta que Will Smith’. Y entonces me fui. Estaba acabado. No hubo publicidad, y mi nombre no fue mencionado”. Esta abrupta exclusión, explicó Tudyk, fue la jugada calculada que mantuvo su participación como Sonny como un misterio para muchos.

Tudyk recordó vívidamente su profunda decepción en ese momento. “Estaba tan impactado”, admitió. “Pensé, ‘Espera, ¡nadie sabrá que estoy en la película!’ Puse mucho en [mi actuación]”. De hecho, su interpretación de Sonny no fue simplemente un papel de voz; fue una compleja empresa de captura de movimiento, que le exigió dominar movimientos robóticos específicos y encarnar físicamente al personaje. Este era un campo incipiente a principios de la década de 2000, solo unos años después de que personajes digitales innovadores, aunque a veces divisivos, como Jar Jar Binks en La Amenaza Fantasma y Gollum en El Señor de los Anillos hubieran llevado los límites de la tecnología. Para Tudyk, quien más tarde se asociaría más estrechamente con la captura de movimiento a través de papeles como K-2SO, este esfuerzo temprano y no acreditado representó una importante inversión personal y profesional.

Aunque Will Smith no ha abordado públicamente las revelaciones de Tudyk —y es poco probable que lo haga— la experiencia del actor resuena dentro de la dinámica de Hollywood de larga data. No es raro que las grandes atracciones de taquilla acaparen la mayor parte de la atención promocional, y hay amplios precedentes de que las estrellas principales no están dispuestas a compartir el protagonismo, particularmente cuando un coprotagonista, incluso uno renderizado digitalmente, obtiene inesperadamente reacciones más favorables del público. El relato de Tudyk ofrece una rara visión de los cálculos que pueden dar forma a la narrativa pública de una película, donde incluso una actuación aclamada por la crítica puede ser marginada si inadvertidamente eclipsa a la estrella principal de la película.

En última instancia, el papel fundamental de Tudyk como Sonny en Yo, Robot es un testimonio de su temprana maestría en la captura de movimiento, una habilidad que definiría gran parte de su carrera posterior. Su historia sirve como un conmovedor recordatorio de los esfuerzos a menudo invisibles detrás de la magia cinematográfica y la compleja interacción de talento, tecnología y poder estelar que dicta quién llega a estar bajo el foco promocional.