Worldcon 2025: Fans de ciencia ficción alzan la voz contra la IA

Geekwire

La principal convención de ciencia ficción del mundo, la Seattle Worldcon 2025, actualmente en curso, se ha encontrado en el epicentro de un debate del mundo real que refleja los mismos temas que su género explora tan a menudo: el profundo y a veces inquietante impacto de la inteligencia artificial en la creatividad humana y el ecosistema de la información. La controversia se encendió cuando los organizadores revelaron en abril que ChatGPT, un gran modelo de lenguaje, había sido utilizado para examinar a más de 1.300 posibles panelistas para el evento.

Esta revelación provocó una protesta inmediata y generalizada de la comunidad de ciencia ficción y fantasía, lo que llevó a la presidenta de Worldcon, Kathy Bond, a emitir una disculpa y comprometerse a rehacer todo el proceso de selección sin herramientas de IA. El propósito declarado para usar ChatGPT era agilizar las verificaciones de antecedentes para posibles “escándalos” como la homofobia, el racismo o el acoso, una tarea que tradicionalmente consumía cientos de horas de voluntarios. Los organizadores afirmaron que la IA ahorró tiempo e incluso mejoró la precisión de la selección después de la revisión humana. Sin embargo, los críticos señalaron rápidamente la inherente falta de fiabilidad y los posibles sesgos de la IA generativa, su formidable costo ambiental y las preocupaciones éticas que rodean su entrenamiento con obras protegidas por derechos de autor sin consentimiento ni compensación. La reacción fue lo suficientemente significativa como para provocar la renuncia de tres altos funcionarios de Worldcon, incluido el administrador de los Hugo.

En respuesta directa a la controversia, algunos escritores y fans organizaron “ConCurrent Seattle”, una conferencia alternativa de un día sin IA celebrada simultáneamente con Worldcon. Encabezada por la novelista y finalista del Hugo Mia Tsai, ConCurrent Seattle rechaza explícitamente el uso de IA generativa, afirmando que “no hay lugar para la IA generativa cuando se ha utilizado para robar a artistas y tiene un impacto devastador en el medio ambiente”. El evento tiene como objetivo ofrecer una programación de calidad mientras mantiene el espíritu tradicional de las convenciones impulsado por humanos.

El incidente de Worldcon sirve como un microcosmos de las ansiedades más amplias e intensificadas dentro de las industrias creativas con respecto a la IA. Autores y artistas temen que las herramientas de IA generativa estén plagiando sus obras, devaluando las contribuciones humanas y amenazando sus medios de vida. La Asociación de Escritores de Ciencia Ficción (SFWA) ha impulsado activamente un régimen de “aceptación” donde los creadores son compensados si su trabajo se utiliza para entrenar modelos de IA. La Oficina de Derechos de Autor de EE. UU., reflejando estas preocupaciones, ha declarado que no registrará obras producidas por IA sin una autoría humana significativa.

Más allá de los derechos de autor, las consideraciones éticas en torno a la IA en la creación de contenido son primordiales. Los expertos enfatizan la necesidad de transparencia cuando la IA está involucrada, así como la vigilancia contra el sesgo algorítmico y la generación de información inexacta o “alucinada”. Si bien la IA está transformando rápidamente sectores como el diseño, la música y la edición de video, ofreciendo nuevas herramientas y eficiencias, persiste el debate sobre si la IA debe ser vista como una “colaboradora” o una “competidora” de los artistas humanos. El episodio de Worldcon subraya la necesidad urgente de una gobernanza sólida y marcos éticos para garantizar que la IA sirva a la creatividad humana en lugar de socavarla.