IA en Fantasy Sports: ¿Optimiza el juego o arruina la diversión?

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Mientras la English Premier League, la liga de fútbol más popular del mundo, vuelve a cautivar a una audiencia televisiva global de aproximadamente mil millones de personas en casi todos los países, millones más seleccionan meticulosamente sus equipos de fútbol de fantasía para los próximos encuentros. Este pasatiempo popular, una mezcla de camaradería y feroz competencia, a menudo ve a los participantes dedicar horas al análisis de datos y la planificación estratégica, encarnando el papel de analistas de sillón. Sin embargo, una nueva iniciativa de la Premier League amenaza con alterar fundamentalmente esta dinámica: la integración de un chatbot de IA, Microsoft Copilot, diseñado para ofrecer consejos sobre la selección de equipos. En lugar de depender únicamente de su propio juicio, los jugadores ahora pueden delegar la selección de la plantilla a la inteligencia artificial.

Este cambio plantea preocupaciones inmediatas sobre la propia naturaleza de los deportes de fantasía. Simon James, jefe de ciencia de datos e IA en Publicis Sapient, y él mismo un apasionado aficionado al fútbol, sugiere que la participación de la IA conducirá a “mucho más conformismo y mucha menos diversidad de equipos”. Argumenta que la IA, desprovista de opiniones partidistas, busca solo el camino de la optimización, lo que podría despojar al fútbol de fantasía de las peculiaridades únicas que lo definen. “El fútbol se trata fundamentalmente de opiniones, y los aficionados están naturalmente más inclinados a elegir a sus jugadores sobre los rivales”, explica James. “Nunca verás a un aficionado del Chelsea eligiendo a Solanke sobre Joao Pedro, pero la IA podría. La IA busca el camino de la optimización, pero eso elimina el elemento tribal que hace que el fútbol de fantasía sea tan atractivo”. Para James, la emoción radica en “elegir lo desconocido”, cuestionando si la IA puede realmente tener en cuenta la miríada de variables e instintos que los jugadores humanos utilizan. “Probablemente no”, concluye.

Joanna Bryson, profesora de ética y tecnología, se hace eco de algunas de estas preocupaciones, expresando inquietud por el potencial de uso excesivo y su impacto en los individuos, particularmente aquellos que luchan contra el síndrome del impostor. Sin embargo, también reconoce el panorama existente de acceso a la información, señalando: “siempre hemos tenido Google, ¿verdad?”. Mientras algunos jugadores de fantasía abordan el juego con una seriedad casi profesional, dedicando extensas horas de investigación que la IA ahora podría simplificar, otros, sin tiempo, a menudo recurren a analistas humanos en línea. Bryson teme que la IA pueda llevar esta tendencia a un extremo, disminuyendo potencialmente las diversas formas en que las personas encuentran disfrute en el juego.

Por el contrario, Joe Lepper, un destacado creador de contenido de fútbol de fantasía, destaca el animado debate dentro de la comunidad. “Algunas personas no les gusta en absoluto. Creen que va a destruir el juego. Y a algunas personas realmente les gusta”, observa. El factor crucial, sostiene Lepper, reside en cómo los jugadores eligen interactuar con la IA. Seguir ciegamente su consejo sin duda “le quitaría la diversión”, pero usarlo como fuente de información para fundamentar la propia toma de decisiones bien podría preservar el disfrute.

Esta evolución tecnológica en los deportes de fantasía refleja una tendencia más amplia hacia el análisis que ha barrido los deportes profesionales, notablemente influenciada por la filosofía “Moneyball”. Mientras algunos adoptan la precisión ofrecida por las ideas basadas en datos, otros lamentan la posible pérdida de imprevisibilidad que hace que el deporte sea tan convincente. Lepper enmarca la situación no como una batalla de “hombre contra máquina”, sino como una relación simbiótica donde la máquina sirve como una ayuda. “La gente puede elegir ignorarlo. La gente puede elegir adoptarlo”, afirma, enfatizando la agencia del jugador.

En última instancia, la discusión en torno a la IA en el fútbol de fantasía refleja la conversación social más amplia sobre el papel de la tecnología en nuestras vidas. Como James resume acertadamente: “Al igual que en los negocios, la IA es excelente para la automatización, pero el jurado aún delibera sobre la inspiración”. El futuro de los deportes de fantasía, al parecer, será un testimonio de cómo los jugadores equilibran el atractivo de la eficiencia algorítmica con el perdurable encanto de la intuición y la pasión humanas.