EE. UU. permite a Nvidia y AMD vender chips de IA a China con un recorte del 15% de ingresos

Techcrunch

Un notable cambio en la política de EE. UU. con respecto a la venta de chips avanzados de inteligencia artificial a China parece estar en marcha, yendo más allá de los imperativos estrictos de seguridad nacional hacia un enfoque más financieramente integrado. Según los informes, los gigantes de los semiconductores Nvidia y AMD han llegado a un acuerdo con el gobierno de EE. UU., consintiendo en remitir el 15% de los ingresos generados por las ventas de chips de IA de alta gama en China. Este acuerdo facilita la emisión de licencias, permitiendo que estas tecnologías cruciales lleguen al mercado chino.

Bajo los términos de este nuevo entendimiento, Nvidia compartirá una porción de sus ganancias por la venta de sus chips de IA H20 en China, mientras que AMD hará lo mismo con sus chips MI308. Ambas compañías, según se informa, han comenzado a recibir las licencias necesarias para proceder con estas ventas.

Este desarrollo marca una evolución significativa con respecto a las posturas de administraciones anteriores. La administración Trump, por ejemplo, había impuesto restricciones a ciertos chips de inferencia de IA de alto rendimiento destinados a China en abril, solo para pausar la prohibición unos meses después. Esa pausa coincidió con el compromiso de Nvidia de realizar sustanciales inversiones en centros de datos, que supuestamente ascendían a 500 mil millones de dólares, dentro de Estados Unidos. Posteriormente, en julio, Nvidia anunció que reanudaría las ventas de sus chips de IA H20 a China, una línea de productos específicamente diseñada para el mercado chino en respuesta a restricciones anteriores impuestas por la administración Biden.

Un portavoz de Nvidia confirmó el compromiso de la compañía de adherirse a las regulaciones del gobierno de EE. UU. que rigen su participación en el mercado global. Si bien reconoció una interrupción en los envíos de H20 a China durante varios meses, el portavoz expresó optimismo de que las políticas de control de exportaciones finalmente permitirían a las empresas estadounidenses competir eficazmente tanto en los mercados chino como global.

El Secretario de Comercio de EE. UU., Howard Lutnick, ha indicado que el cambio de estrategia de Nvidia está entrelazado con discusiones comerciales más amplias con China, particularmente en lo que respecta a los elementos de tierras raras. Estos materiales críticos son indispensables para la fabricación de una amplia gama de componentes, incluidas las baterías recargables vitales para vehículos eléctricos, lo que destaca la compleja interacción entre tecnología, comercio e intereses geopolíticos.

A pesar de la aparente lógica económica detrás de esta nueva política, no ha estado exenta de detractores. Expertos en seguridad nacional y exfuncionarios gubernamentales han expresado fuertes preocupaciones, instando al Secretario Lutnick a reconsiderar la decisión. Sus críticas subrayan un debate en curso en Washington sobre el equilibrio entre los intereses comerciales y los objetivos estratégicos de seguridad nacional en el panorama rápidamente cambiante de la tecnología de IA.