SoftBank busca unidad de chips de Intel tras inversión de $2 mil millones
El fundador multimillonario de SoftBank, Masayoshi Son, mantuvo recientemente conversaciones de alto nivel con el director ejecutivo de Intel, Lip-Bu Tan, sobre la posible adquisición de la división de fabricación de chips por contrato de Intel, que se encuentra en dificultades. Estas conversaciones confidenciales tuvieron lugar semanas antes del anuncio público de SoftBank de una inversión de 2 mil millones de dólares en acciones de Intel, lo que señala un interés estratégico más profundo que una mera participación financiera.
Fuentes familiarizadas con las discusiones indican que Son y Tan se han reunido desde el nombramiento de Tan en marzo, explorando diversas vías, incluidas empresas conjuntas con terceros o una inversión minoritaria similar a la revelada esta semana. A pesar de la reciente compra de acciones, algunos sugieren que esta inversión inicial no excluye un acuerdo mayor para el llamado “negocio de fundición” de Intel en el futuro. Tanto SoftBank como Intel se han negado a comentar los detalles específicos de estas negociaciones.
El ambicioso movimiento de Intel en 2021, bajo el ex director ejecutivo Pat Gelsinger, de abrir sus instalaciones de fabricación de chips avanzados a clientes externos, en gran medida no logró atraer negocios significativos, a pesar de los miles de millones invertidos en nuevas plantas de fabricación. Este costoso esfuerzo, junto con los desafíos financieros más amplios de Intel, ha llevado a Lip-Bu Tan a emitir advertencias de que la compañía podría retirarse de los procesos de producción de chips más vanguardistas, al no poder competir eficazmente con el líder de la industria, Taiwan Semiconductor Manufacturing Company (TSMC).
Añadiendo otra capa de complejidad, el gobierno de EE. UU. también ha estado explorando la posibilidad de adquirir una participación en Intel. Fuentes internas sugieren que tal movimiento por parte de Washington reforzaría significativamente el caso para una mayor inversión de SoftBank. El sentimiento entre quienes están familiarizados con las conversaciones es que ninguna entidad individual está dispuesta a asumir el inmenso riesgo y la inversión requeridos para los planes de fabricación de Intel por sí sola, particularmente dado que Intel a menudo sigue siendo su propio cliente principal.
Para Masayoshi Son de SoftBank, adquirir la división de fabricación de chips de Intel se alinea perfectamente con su visión expansiva de una infraestructura integral de inteligencia artificial, que abarca robótica, energía y producción de chips. Son, quien ya posee participaciones significativas en pioneros de la IA como OpenAI y Nvidia, también es la fuerza impulsora detrás del colosal proyecto de centro de datos Stargate de 500 mil millones de dólares. Además, Arm, propiedad de SoftBank y una potencia en el diseño de semiconductores, confirmó recientemente que está explorando el desarrollo de sus propios chips. Un intento anterior de SoftBank e Intel el año pasado de colaborar en un chip de IA fracasó cuando Intel tuvo dificultades para cumplir con las exigentes especificaciones de SoftBank.
La dimensión política de estas discusiones es igualmente convincente. Masayoshi Son mantiene una estrecha relación personal con el presidente de EE. UU., Donald Trump, visitando frecuentemente EE. UU. cada dos semanas. Trump y Son aparecieron juntos en enero para anunciar el proyecto Stargate, un hecho famoso. Mantener la capacidad de fabricación de chips avanzados dentro de EE. UU. es una prioridad clave para la administración Trump, ansiosa por contrarrestar el dominio global de TSMC, gran parte del cual se concentra en Taiwán. Curiosamente, la opinión del presidente Trump sobre Lip-Bu Tan ha cambiado drásticamente en las últimas semanas, pasando de pedir públicamente su renuncia a elogiar su “éxito y ascenso” tras una reunión reciente.
Esta interacción estratégica entre la ambición corporativa y la seguridad nacional encuentra un precedente potencial en la decisión del Departamento de Defensa de EE. UU. en julio de convertirse en el mayor accionista del productor estadounidense de tierras raras MP Materials. La inversión de 400 millones de dólares del Pentágono tenía como objetivo reforzar las cadenas de suministro nacionales y reducir la dependencia de China para minerales críticos, un modelo que podría aplicarse para desbloquear una mayor inversión de SoftBank en las vitales operaciones de chips de Intel. Si bien las acciones de SoftBank experimentaron una modesta disminución de aproximadamente el 2 por ciento en Tokio el martes, han aumentado más del 75 por ciento en lo que va del año, impulsadas por la confianza de los inversores en la estrategia del conglomerado de monetizar sus empresas de cartera y la creciente valoración de su participación en OpenAI.